lunes, 14 de mayo de 2012

¿Una máquina aceitada?

Hojeando las páginas de la tribuna de doctrina, en el día de la fecha, recordé que en el post anterior, en el cual dedicara mi "semiótica" (al decir de Carrió y de otro que prefiero no mencionar) a analizar sucintamente ciertos aspectos relacionados con el programa de Jorge Lanata,  hice cierta observación a modo de nota de color, al pasar:


"Dicho sea de paso, parece que La Nación se ha transformado en tu vocero, Jorge: Tus dos programas fueron noticia en sus páginas, al día siguiente de su emisión: Veremos qué sucede los lunes subsiguientes en este sentido" 


  Bueno. Parece que no me equivoqué: No conforme con repetir la metodología con los programas sucesivos, La Nación, hoy, parece haber subido la apuesta incitando a ciertos lectores a volcar sus "sentimientos".


Algunas consideraciones: 


  1)  Si me lo preguntan, preferiría que CFK diera más conferencias de prensa, por tres sencillas razones: 
a)  Una cuestión de transparencia en la comunicación. 
b)  Entiendo que tiene resto de sobra como para hacerlo. 
c)  Directamente vinculado al punto "a": Evitar dejar resquicios para este tipo de chicanas mediáticas. 

  2)  Parece que La Nación, fiel a cierta vocación antipopular, estableció, tomando como materia prima la última emisión del programa de Jorge Lanata, una pregunta señuelo pensando en un enunciatario claro y concreto: Su "lector modelo", quien, tragando este anzuelo (preservativos útiles, tan útiles como previsibles) no vaciló en insultar y bastardear la voluntad popular expresada en las urnas, incluyendo referencias grotescas e irrespetuosas a gente que ya no existe físicamente (Néstor Kirchner) y lisos y llanos agravios a la investidura presidencial, denotando y connotando un ánimo destituyente y antidemocrático insoslayable. Un claro ejemplo de "libertad" de expresión.

  3)  Muchos de los periodistas que estuvieron en el programa de Lanata clamando por poder ejercer sus ansias de preguntar son quienes (Morales Solá, a la cabeza) eluden constantemente a ciertos movileros que les hacen preguntas, incómodas, si, pero no por ello menos respetuosas. En este sentido, no está de más recordar que la mayoría de estos periodistas son figuras públicas que contribuyen a diario a la construcción de sentido, a la formación de opinión pública, nada menos, con la enorme responsabilidad que ello conlleva (la libertad de expresión es un camino de doble sentido, muchach@s: No parece demasiado coherente exigir lo que no parecen ser capaces de ofrecer) 

  4)  La invitación de La Nación parece tendenciosamente generalista, por ello podría producir similares efectos de sentido aún prescindiendo de la figura de CFK como objeto: Si un diario "X", cuyo contrato de lectura que apunta a un lector que profesa la ideología "A" , publica una invitación a opinar sobre un dirigente con una ideología "B" (contraria a "A"), es claro que arreciarán los comentarios en contra de este último blanco de ataque. 

  5)  A esta altura, llama poderosamente la atención la réplica sistemática que La Nación ha hecho, todos los días lunes, de cuestiones ventiladas en el programa de Jorge Lanata, otorgando status de nocicia a algo que no lo es. Digo: Una, dos, hasta tres veces, puede pasar, pero... ¿todos los programas merecen status de noticia? ¿y si a esto le sumamos idéntica operación en TN, en telenoche, y en la decena de medios del grupo & afines? 
Algún malpensado diría que estamos en presencia de una máquina mediática bastante aceitada: Te la tiro el Domingo, te la repito acá, allá y en todas partes, durante toda la semana.


 6)  La mayoría de los comentarios son indiscutiblemente anti K. Y estamos hablando, a esta hora, de aproximadamente 3000 comentarios. En referencia a esto, me pregunto ¿qué pasó con la "usina ciber k"? ¿se quedaron dormidos? ¿no les pagaron el sueldo? ¿se dieron una panzada de choris en mal estado? ¿abuso de tetra, tal vez? 


Vaya uno a saber.





  Curiosidad al margen 1: La mayoría de las questiones, tanto las formuladas por los periodistas en el programa de Lanata, como las pergeñadas por el grueso de los lectores de La Nación, constituyen lo que podría darse en llamar "asertos bajo forma de preguntas". Para ejemplificar, algo así como preguntar ¿Los ingenieros civiles son menos pelotudos que los ingenieros agrónomos? 


 Curiosidad al margen 2: ¿No notaron que prácticamente no hay morochos con rasgos de originarios en la claque que ocupa la tribuna del programa y en las fotografías ("fuck you") que envían algunos televidentes parodiando a 678? ¿por qué será?

16 comentarios:

Anónimo dijo...

Estás ensayando para periodista mediocre??, la relación entre las pocas visitas y la cantidad de seguidores, te da la pauta de las boluceces que escribes.

Desocupado mental en la era del blog dijo...

Leí que los de la tribuna eran estudiantes de la Universidad Católica, pero no lo sé con seguridad.
Coincido con lo que decís, y me gustó bastante este post de Oscar Cuervo:
http://www.tallerlaotra.blogspot.com.ar/2012/05/queremospreguntar-extraordinario.html

Cosmocosme dijo...

O sea: ¿Lo cualitativo está determinado por lo cuantitativo? ¡Vaya manera de razonar! Este blog podrá ser (o no) una garcha, desde el punto de vista cualitativo, pero no comprendo la relación causal ya que existen productos muchísimo peores (y mejores también) que cuentan con muchísimos "seguidores". ¿Podrías explicarla?
Graciaaaaaas.

Cosmocosme dijo...

Te juro que no sabía nada! Pero lo cierto es que me recordó mucho, mucho, al bunker de Macri cuando ganó las elecciones de la Ciudad. Rostros casi idénticos, de publicidad, podría decirse: La connotación operando a pleno para naturalizar mitos (hoy me agarró por le lado barthesiano...): "Gente como uno"...
En cuanto pueda paso por el link.
Gracias por pasar!

Anónimo dijo...

CosmoCosme, voy a seguir tu consejo de la portada, aunque realmente creo que vos no confundís a nadie.

Ricardo dijo...

A mí también me gustaría una política de comunicación más abierta, pero eso, en definitiva, no hace al fondo. Más bien sería un distractivo y hasta un impedimento para llevar adelante las cuestiones de fondo.
Porque, reconozcámoslo, el periodismo que tenemos es una berretada en su gran mayoría. Basta recordar a Míndez preguntándole a Kirchner para concluir que, conferencias de prensa, quieren sólo los que están haciendo política y no periodismo.

Saludos.

Cosmocosme dijo...

Ni hablar, Ricardo. Mi planteo, ahora que lo decís, es una política de comunicación más abierta, siempre y cuando no se constituya como impedimento para llevar adelante cuestiones de fondo.
Supongo que será cuestión de capacidad para sopesar qué es más dañino. En el 2009 quedó demostrado, en cierta medida, que la política comunicacional de fines del 2008 hasta las elecciones (2009) falló. Todo lo contrario a lo que sucedió desde ese momento hasta las elecciones 2011.

En este momento, el ataque me parece más sistemático que nunca. Tal vez un poquitín de apertura no vendría mal.

Pero no lo sé con certeza: Al fin y al cabo, CFK ha demostrado manejarse más que bien, a largo plazo,

Saludos.

Cosmocosme dijo...

De fines del 2007, quise decir.

roberto dijo...

¿cuanto te paga el "bigoton" Fernandez para decir boludeces?

Anónimo dijo...

una maquina aceitada es el multimedio que armo tu idola cristina, pedazo de ignorante.

alberto dijo...

ja ja ja es verdad, este ensaya para periodista obsecuente

Cosmocosme dijo...

u$s 300.000.000 la hora. Además, tengo asegurada la provisión diaria de tetra y chori hasta 2015, por lo menos.

Cosmocosme dijo...

No pudiste explicarla. En su lugar, un insulto, para variar (qué calentito que te quedaste, amigo).
Haceme caso: tu obsesión no parece sana. Un profesional puede darte una gran mano para salir del pozo.

Cosmocosme dijo...

Ya te dije, querido: es muy notoria la obsesión que tenés con este blog. Ya son muchos años. Tu caso, creo, encuadra en un caso "psi". Yo no sé qué resorte habré tocado para generar semejante nivel de obsesión, lo que si se es que ese resorte es tuyo y no mío. Buscate un profesional que pueda ayudarte a descubrir que hay detrás de este síntoma que se expresa en perseguir a un ignoto bloguero para insultarlo de todas las maneras imaginables, durante más de cuatro años.

Alfonso González dijo...

Cabe destacar que en Buenos Aires hay muchos mas gringos que en el resto del país. Por eso es que hay pocos " cabezas negras" en la tribuna.

Cosmocosme dijo...

Unknow:
Te recuerdo que en Buenos Aires hay un gran porcentaje de gente con sangre originaria. Destaco esa ausencia porque ese porcentaje prácticamente no aparece en la tribuna del programa de Lanata. Por supuesto, la mayoría de los más morenos de Buenos Aires suelen pertenecer a los estratos sociales menos favorecidos. Tal vez esto tenga algo que ver con la composición de la tribuna del programa de Lanata. Digo, de pronto, me parece.